El día de hoy terminó oficialmente mi semestre, ahora sí, a disfrutar las maravillosas vacaciones. Para celebrar este fin de ciclo, iré a una fiesta, donde tocará un amigo, Maui.
A ver que tal se pone la fiesta, todos esperamos que muy bien. Que llegue un viernes y no tengas nada que hacer es deprimente, por suerte, ya tengo planes y se escuchan prometedores. Pasando a otro orden de ideas, el TRI calificó a la final, como se esperaba desde un principio, sin embargo, aun no convencen, su futbol por momentos carece totalmente de cohesión, los cambios no son lo que se espera, en fin, no llegan nada, nada bien para enfrentar al conjunto de las barras y las estrellas el domingo.
El juego es a las 14:00 horas, hora central en México, esperemos se imponga la jerarquia pero que nadie se confíe, en esta edición de la Copa Oro ningún rival al que la selección mexicana ha enfrentado tiene los tamaños de nuestros vecinos del Norte. Podrán parecer arrogantes, egocéntricos y soberbios por momentos los comentarios de Landon Donovan, lo que se vuelve una realidad es que el sabe del nivel que su escuadra ha adquirido y la considerable baja de juego por la que pasa el cuadro dirigido por Sánchez. Es hora ya, en la final, de demostrar que no sólo hay que ganar como sea sino convencer, no hay que olvidar que el día miércoles enfrenta México a Brasil en la Copa América y no estamos en momento de ver si podemos lograr con lo mínimo colarnos a la siguiente fase.
Una vez más espero que la escuadra azteca salga con todo, a consolidarse y a jugar bien, como en los últimos tiempos, contra el rival incómodo, EEUU. Nadie olvide que por lo general nos pintan la cara cuando jugamos en sus tierras. Confío en Cuauhtemoc Blanco para hacer un buen papel, en Nery para el inicio y un medio campo sólido y dinámico. Hasta la próxima.
A ver que tal se pone la fiesta, todos esperamos que muy bien. Que llegue un viernes y no tengas nada que hacer es deprimente, por suerte, ya tengo planes y se escuchan prometedores. Pasando a otro orden de ideas, el TRI calificó a la final, como se esperaba desde un principio, sin embargo, aun no convencen, su futbol por momentos carece totalmente de cohesión, los cambios no son lo que se espera, en fin, no llegan nada, nada bien para enfrentar al conjunto de las barras y las estrellas el domingo.
El juego es a las 14:00 horas, hora central en México, esperemos se imponga la jerarquia pero que nadie se confíe, en esta edición de la Copa Oro ningún rival al que la selección mexicana ha enfrentado tiene los tamaños de nuestros vecinos del Norte. Podrán parecer arrogantes, egocéntricos y soberbios por momentos los comentarios de Landon Donovan, lo que se vuelve una realidad es que el sabe del nivel que su escuadra ha adquirido y la considerable baja de juego por la que pasa el cuadro dirigido por Sánchez. Es hora ya, en la final, de demostrar que no sólo hay que ganar como sea sino convencer, no hay que olvidar que el día miércoles enfrenta México a Brasil en la Copa América y no estamos en momento de ver si podemos lograr con lo mínimo colarnos a la siguiente fase.
Una vez más espero que la escuadra azteca salga con todo, a consolidarse y a jugar bien, como en los últimos tiempos, contra el rival incómodo, EEUU. Nadie olvide que por lo general nos pintan la cara cuando jugamos en sus tierras. Confío en Cuauhtemoc Blanco para hacer un buen papel, en Nery para el inicio y un medio campo sólido y dinámico. Hasta la próxima.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario